lunes, 24 de octubre de 2011

RECUERDOS DE UN ANIVERSARIO


Hoy se cumple un año de un día que difícilmente podremos olvidar. Aquel 24 de Octubre de 2010 quedará grabado en la historia de nuestra Hermandad y en la reciente historia de Cabra. Era el culmen de todo un año cargado de actividades, de cultos y como no, de un trabajo incansable de todos los que formamos la Junta de Gobierno y de un número importante de hermanos dispuestos siempre a colaborar con nosotros y con la Hermandad.


Ese día terminaba los actos de celebración del 350 Aniversario de nuestros Orígenes. Día que comenzó con el Solemne Pontifical que presidió el Cardenal Monseñor Fray Carlos Amigo Vallejo, Arzobispo Emérito de Sevilla, concelebrando junto a nuestro Consiliario don Zacarías Romero Arroyo. Su homilía fue muy cercana a todos y en sus palabras nos animó a vivir desde el amor y dejar fuera de nuestra vida la envidia, el orgullo, el odio y el rencor. También nos decía que si extraordinario es el pasado de nuestra hermandad, la celebración de este aniversario no debía ser el final de una etapa sino el comienzo de una nueva. Así debemos emprender la nueva etapa que nos ha tocado vivir, donde el amor entre todos los que formamos parte de esta Hermandad sea el primer y principal protagonista.


El día se cerraba con la procesión extraordinaria de nuestro Sagrado Titular que lucía las nuevas potencias de plata chapadas en oro con pedrería, bendecidas por el propio Cardenal. En la puerta del Ayuntamiento la Alcaldesa nos entregaba el pergamino del Decreto que nos otorgaba la Mención Honorífica, significada en el escudo de oro de la ciudad y que ella misma imponía a Jesús de la Columna y Azotes. La voz de José Manuel Rodríguez y el piano de Alfonso Fernández ponían las notas musicales a un sencillo pero emotivo acto, cerrando así un año cargado de sentimientos.


Con estas pocas palabras quiero agradecer a todos los que hicieron posible dicha efemérides, a los que están y aquellos que formaron parte de la Hermandad, a todos mi eterno agradecimiento. Me siento tremendamente afortunado por ser parte de esta historia, que entre todos estamos escribiendo, pero al igual que Monseñor en su homilía, os animo a todos a trabajar por engrandecer nuestra Cofradía, sin olvidar nunca lo más importante, el amor a nuestros semejantes, y a nuestros hermanos, así pasados unos años, cuando los que nos precedan celebren su aniversario puedan decir como Fray Carlos Amigo nos dijo : "¡Cómo pasa el tiempo... y cómo permanece el amor!".



Jesús Manuel Cañete Navas
HERMANO MAYOR


1 comentario:

  1. en ese dia tambien fue muy importante las nuevas POTENCIAS DEL SEÑOR¡¡

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