DOMINGO COBO ÁVILA PREGONÓ CON GUSTO EXQUISITO EL MUNDO DEL COSTALERO

Con un lleno absoluto, la Iglesia de San Juan cobijó el XXIII Pregón del Costalero donde el cofrade Juan Moral Moral fue reconocido por toda una vida al servicio de las cofradías y de la Semana Santa de Cabra.

A la una del mediodía nuestro Hermano Mayor, Jesús Manuel Cañete Navas comenzaba el acto evocando unos pasajes del evangelio relatando  la Pasión de Jesucristo y el momento que Simón de Cirene cargaba con el madero donde horas después era crucificado el Redentor para la salvación del mundo, siendo así Simón el primer costalero de la historia.

Seguidamente Juan Moral Moral cofrade de gran trayectoria en la Semana Santa egabrense, era reconocido por su trabajo y entrega desinteresada en aquellas cofradías donde ha tenido alguna responsabilidad y su colaboración siempre absoluta a cuantos han requerido algo de su persona. El Hermano Mayor junto al consiliario D. Zacarías Romero entregaba un pergamino dando constancia de este reconocimiento.

Tras ello, D. Antonio Muñiz Canela tomaba el atril para presentar a su amigo y hermano de costal D. Domingo Cobo Ávila, cofrade, costalero y amigo de sus amigos, quien supo llegar a todos los presentes con palabras sencillas, pero emotivas y llenas de sentimiento costalero. Un recuerdo especial para todos aquellos costaleros que se han ido quedando en el camino por diferentes circunstancias, los que cobrando un pequeño jornal eran profesionales, portando así nuestras imágenes y gracias a ellos dar paso a los hermanos costaleros y los que ya se encuentran gozando de la gloria eterna, fue algunos de los momentos que hicieron que las lagrimas brotaran del mismo pregonero y de muchos de los presentes. Las saetas de una saga de lujo, Pepe y David Barranco, hermanos de nuestra Cofradía nos hicieron vivir a todos un momento difícil de olvidar. Con un sonoro y prolongado aplauso Domingo Cobo terminaba su pregón que ya anuncia que en pocos días los traslados de los pasos nos anuncia una fiesta que nos hará sentir unas emociones, que no por repetidas años tras año, nos dejará momentos y vivencias siempre nuevas.